A calzón quita'o

Archivo: Octubre 2016

La mejor manera de criar a tu bebé... Todo el mundo tiene las respuestas, todas son correctas, los métodos son lo último en la avenida y todos nos los quieren meter por los ojos, la boca y la nariz. ¿Cuándo fue que las mujeres dejaron de apoyarse unas a otras para hacerse trizas por pensar diferente? En un abrir y cerrar de ojos, nos hemos vuelto portavoces de los mayores trends... Compartiendo artículos sin base, ni fundamento, ni datos reales que respalden lo que se dice. ¡Coño! Yo no soy experta en ser madre, y perdóname, mamita, pero tú tampoco lo eres.

Un día sale un artículo que dice: "Las 10 razones por las cuales la madre ama de casa es la mejor", y la semana siguiente "Madre trabajadora, lo mejor de los dos mundos"; hombre, no, los dos artículos me explotan la salud. Esto no es una competencia, métanse las 10 razones junto con lo mejor de los dos mundos por donde no les da el sol. Ah, y sus comentarios también métanselos por allí mismo. Las mujeres que trabajan son madres excelentes, tal como las que se quedan en casa. Ambos lados tienen sus altas y sus bajas. ¡Está CABRÓN ser madres! No me malinterpretes, es el mejor regalo que me ha dado la vida, pero créeme cuando te digo que es difícil con cojones. Nadie tiene las respuestas correctas, hacemos lo mejor que podemos, bregamos con lo que tenemos, dando lo mejor para nuestros hijos.

Soy culpable, he juzgado. Sí, lo he hecho, yo he juzgado. Pero dime, ¿qué no lo has hecho tú? Que si amamantas a tu bebé mucho, eres exagerada (coño, le estás dando comida), que si la teta al aire o la teta cubierta... ¿A ti te gustaría comer con una sábana en la cara? Si las tetas son para eso, amamantar. Y si no le das pecho a tu hijo, Facebook se encarga de dejarte saber que eres mala madre... Ah, te dicen que la leche de fórmula es mala (cuando hay pruebas contundentes que no, y no eres la única que la usa), somos tan rápidos en juzgar. Pero no conocemos la historia detrás de cada decisión. No sabemos si fue que la madre no pudo aunque quiso, quizás tiene una condición, o trabaja mucho para poner la comida sobre la mesa y no tiene la oportunidad de hacerlo, quizás es solo que carajo no quiere dar teta y mira ya está bien... Yo lo hice por 4 meses y créeme que estaba feliz cuando me sequé y no di más leche, y muchos me dijeron por qué dejé de hacerlo, que ay que eso está mal. Son rápidos en juzgar lo que se ve de afuera. Pero yo tranquila, que se joda las tetas y la niña son mías... No te digo que está bien que un niño grite a todo lo que da en la oficina del doctor, porque es niño, eso no significa que no debe aprender a comportarse (no estamos en el hipódromo tampoco). Pero debemos dejar de juzgarnos, la verdad es que no sabremos cómo estamos siendo como padres hasta que ya los niños estén grandes y para ese momento ya lo hecho está hecho.

Vamos a disfrutarnos nuestros hijos, a nuestras amistades dejar que cada cual haga con su muchachito lo que quiera. Seamos más humanos y menos imponentes. Todos lo hemos hecho, a mí también me cayó mi agüita. Pero me tomé 2 semanas con tres maravillosas madres con diferentes formas de pensar que se juntaron para una celebración, y vi desde cerca lo grande que son cada una a su manera, intercambiamos ideas, opinamos sin ofender y nos reímos de las ocurrencias de los chiquillos... Esos son los momentos que valen, eso es vivir. Así que quítale el guante a tu amiga, sácala a un café o a tres shots de patrón y conversen sobre la vida, sobre ser madres, dejando el prejuicio junto con tu celular en la cartera.